En un día realmente incomparable, los equipos de Tigres Femenil y Tigres tuvieron un entrenamiento compartido en el Estadio Universitario, por primera vez en la historia de la institución.
En un ambiente que combinó a las dos aficiones, en el que se veían familias enteras de ocho o más miembros, de las que acuden a los partidos de Las Amazonas, "convivieron" con la infaltable barra de los Libres y los Lokos, con su color y cánticos en la tribuna.
No fue la mejor entrada, como la del entrenamiento de Tigres previo la Final del Apertura 2017, en la que se dieron cita 33 mil aficionados, esta vez, en plena semana la laboral, ingresaron unos 8 mil seguidores.
El entrenamiento recreativo que consistió en cascaritas y retas de balon-tenis, también marcó el regreso del jugador colombiano Luis Quiñones, quién había sido separado del plantel por algunas diferencias con el club.
En un entrenamiento "igualitario" para los equipos de Tigres, la convivencia entre dos equipos y dos aficiones fue Incomparable.