Monterrey.- El Draft de la NFL es uno de los eventos más emocionantes previo a cada temporada, pero en los últimos años las primeras selecciones han dejado mucho que desear, especialmente los quarterbacks, quienes suelen tener las expectativas más altas. De las últimas seis primeras selecciones, cinco han sido mariscales de campo, y cuatro han decepcionado, tal es el caso de Caleb Williams con Chicago.
Williams llegó a los Bears como la primera selección global en 2024, catalogado como el mejor quarterback de su generación. Su habilidad para lanzar y correr lo hacía ideal para el fútbol americano moderno. Sin embargo, su primera temporada terminó con un récord de 4-12, incluyendo diez derrotas consecutivas. Aunque sus números individuales no son malos (19 pases de anotación, 3,300 yardas aéreas, seis intercepciones y 299 yardas por tierra), los osos quedaron eliminados como últimos en la NFC Norte.
Trevor Lawrence, elegido en 2021 por los Jacksonville Jaguars, fue considerado un cambio generacional. En su temporada de novato registró el peor récord de la liga (3-14) y lanzó 17 intercepciones. Aunque ha mejorado ligeramente (récord de 22-38, 69 touchdowns y 46 intercepciones), solo tiene una temporada ganadora y su desempeño reciente ha sido afectado por lesiones.
Kyler Murray, primera selección de 2019 por los Cardenales de Arizona, cambió una carrera en el béisbol por la NFL. Aunque muestra destellos de talento, su récord de 35-45-1 y una única aparición en playoffs con dos intercepciones lo mantienen lejos de las expectativas.
Bryce Young, tomado por los Carolina Panthers en 2023, ha tenido problemas. Con un récord de 5-24 y habiendo perdido la titularidad, apenas comienza a mostrar mejoras en los últimos juegos.
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El único que ha cumplido las expectativas es Joe Burrow. Elegido por los Cincinnati Bengals en 2020, transformó a la franquicia y los llevó al Super Bowl, venciendo a los Kansas City Chiefs. Su récord es de 37-30, con un promedio de 274 yardas y dos touchdowns por partido.