Magdaleno Cano pide más oportunidades para los canteranos de Rayados

Magdaleno Cano, histórico defensa de Rayados, comparte su perspectiva sobre Iker Fimbres y la importancia de respaldar a los jóvenes talentos para triunfar en el fútbol profesional.

Magdaleno Cano critica la falta de oportunidades para los canteranos en el fútbol mexicano.
Magdaleno Cano Ferro y su legado en Rayados: confianza y formación de canteranos.Magdaleno Cano critica la falta de oportunidades para los canteranos en el fútbol mexicano.Créditos: MEXSPORT
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Monterrey.- Magdaleno Cano Ferro es sinónimo de Rayados. Con 424 partidos oficiales disputados, el histórico defensa es el segundo jugador con más encuentros en la historia del Club de Futbol Monterrey, solo detrás de Jesús 'Cabrito' Arellano. Además, su trabajo como formador en las Fuerzas Básicas del club durante más de dos décadas lo convierte en una de las voces más autorizadas para hablar sobre los canteranos y su proyección en el primer equipo.

Cano compartió su opinión sobre Iker Fimbres, el más reciente talento de la cantera en destacar con el primer equipo, así como su perspectiva sobre el desarrollo y respaldo que necesitan los jóvenes jugadores para triunfar en el fútbol profesional.

Pregunta: ¿Qué opinión tiene sobre Iker Fimbres, la nueva figura canterana?

Respuesta: Iker está aprovechando bien la oportunidad que le dieron. Ha demostrado que tiene talento y capacidad, como lo vimos en el Clásico Regio. Pero lo único que siempre critico es que no le den más oportunidades a otros jóvenes. Las Fuerzas Básicas están trabajando bien, pero falta confianza para que los entrenadores apuesten más por ellos”, señaló Cano.

Cano habló sobre la dificultad de que un canterano actual alcance cifras similares a las de su carrera o la de Arellano. 

¿Puede un canterano alcanzar el récord de partidos?

Respuesta: “Fue satisfactorio llegar a esos números, pero me inicié a los 17 años y fui titular a los 18. Cometí errores, pero mis entrenadores me respaldaron. Hoy, si un joven comete un error, lo borran por completo. Los entrenadores deben recordar cuántos errores cometieron ellos y cómo los apoyaron. Falta respaldo para que los chicos crezcan”, afirmó.

Un legado imborrable

Debutando a los 17 años el 25 de marzo de 1967, Cano marcó una era en Rayados, no solo como jugador, sino como formador. “El amor y lealtad por estos colores siempre estarán en mi corazón. Ver a un joven triunfar en Rayados es mi mayor orgullo”, concluyó.