Washington.- Tan solos dos semanas después que el Tribunal Supremo revocará el derecho al aborto en Estados Unidos, el mandatario de aquella nación, Joe Biden, firmó órdenes ejecutivas para defender el aborto de las mujeres estadounidenses,
Biden estuvo acompañado por la vicepresidenta, Kamala Harris; y el secretario de Salud, Xavier Becerra; y solicitó que se garanticen estas protecciones para todas las mujeres estadounidenses que buscan abortar.
En las órdenes ejecutivas se instó a la Secretaría de Salud ampliar el acceso a píldoras abortivas, garantizar que todos los pacientes tengan acceso a servicios médicos de emergencia amparados por la ley y a proteger el acceso a métodos anticonceptivos.
A la misma dependencia gubernamental se le pidió que aumente los esfuerzos de comunicación en materia de acceso a servicios de salud reproductiva y al aborto.
Por su parte, la Casa Blanca y el Fiscal General de Estados Unidos organizarán un equipo de abogados, asociaciones legales y entidades cívicas para defender a pacientes, proveedores y terceros que busquen acceder u ofrezcan servicios de salud reproductiva en todo el país.
Otra orden es ampliar la protección a la privacidad de las pacientes, así como la seguridad de pacientes, proveedores y clínicas abortistas.
Esta reacción de Joe Biden llega después de que recibiera numerosas críticas desde su propio partido durante las últimas semanas al considerar que no está haciendo lo suficiente para defender el derecho al aborto tras el fallo del Tribunal Supremo.