Monterrey.- La sequía por la que atraviesan Nuevo León y otros estados en el norte de México se ha extendido por varios meses, afectando a la ciudadanía y dejando imágenes sorprendentes que le han dado la vuelta al mundo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador y las autoridades estatales han firmado acuerdos y se han comprometido a acabar con esta problemática, aunque los expertos apuntan a que perduraría hasta 2023.
No solo la falta de lluvias en el último tiempo ha afectado al desabasto de agua, que llevó a las restricciones en el servicio, si no que se debe a diferentes factores, como lo son:
El fenómeno de La Niña
La sequía en el norte del país se debe en gran parte a La Niña, un fenómeno climatológico que, a nivel global, modifica los vientos y las precipitaciones.
Este provoca que las lluvias paren en el norte de México desde diciembre a mayo o junio e influencia un cambio de patrones que provocan temperaturas más calientes, que derivan en la sequía que se vive.
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La Niña y su contraparte El Niño, pueden alterar la temperatura y causar efectos atmosféricos extremos; aunque no suelen durar más de un año, esta ocasión persiste desde 2020, en una situación que no se presentaba desde hace 20 años.
Falta de infraestructura hídrica
En Nuevo León, la mitad del agua que llega a la metrópoli es a través de pozos subterráneos y la otra mitad de las tres presas, pero la falta de lluvia ha provocado que Cerro Prieto y La Boca tengan niveles de llenado alarmantes.
La cancelación de proyectos como Monterrey VI, la tardía reacción para comenzar a construir la Presa Libertad y el acueducto El Cuchillo II, así como el poco uso de pozos antes de que agravara el problema, dejó grabes afectaciones en el abasto de la ciudadanía.
Uso de agua en industria y ganadería
Las cifras oficiales de Conagua indican que la mayor parte del agua de Nuevo León se destina al uso agropecuario e industrial, con la mayor parte de empresas explotando pozos ‘privados’ gracias a acuerdos de concesión.
Y aunque algunas empresas e incluso el sector agrícola anunciaron que cederán parte de sus concesiones de agua, las cifras no parecen ser suficientes, hasta el punto que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió a las empresas cervezeras y refresqueras parar su producción por completo.
Recientemente, el mandatario nacional anunció que Conagua ya no otorgará nuevas concesiones de agua a empresas privadas en estados afectados por la sequía.
Incendios forestales
En los últimos años los incendios forestales han aumentado en el estado, especialmente en la Cierra de Santiago, llegando a registrar los siniestros más grandes del país por momento. Esta situación puede sumarse a la deforestación.
Las cuencas en las áreas naturales del estado están afectadas por los recurrentes incendios, que de acuerdo con el experto Antonio Hernández, quien concedió una entrevista a BBC Mundo, en los últimos 2 años se calcula en unas 21 mil hectáreas la extensión quemada.
El experto señala que los gobiernos no pueden tener una óptica extracción de agua hasta que dé inicio un proceso de restauración ecológica de esas cuencas.
Otro factor a mejorar señalado por expertos es la necesidad de mejorar la educación ambiental entre la población y fomentar un uso más responsable del agua en una región en la que se localizaron diversas tomas clandestinas que desviaban agua hacia ranchos y terrenos privados.
¿La sequía terminará pronto?
La meteoróloga Domínguez Sarmiento asegura que las previsiones actuales apuntan a que La Niña se extenderá al menos hasta final de año.
Para noviembre habrá que volver a analizar los modelos de predicción para analizar las previsiones sobre 2023, cuando se podría pasar a una beneficiosa fase neutra.
Sin embargo, se espera que la actual temporada de lluvias ayude al estado y otras entidades del norte del país, aunque Nuevo León necesitaría de un ciclón tropical para conseguir la alta cantidad de precipitación que se necesita.