El alto crecimiento que tiene el comercio electrónico impulsa en las compañías referentes el interés por reducir su impacto en el medio ambiente.
En el caso de Amazon, desde 2019 se dio a conocer una alianza con el fabricante de autos eléctricos Rivian, a través de la cual se formalizó un pedido de 10,000 unidades de última milla para el 2030.
A través de Julio Valle, líder de sustentabilidad en Amazon México, la empresa de Jeff Bezos, quien recientemente recuperó la posición de hombre más rico del mundo, comenta que en la capital del país, el 58% de las emisiones de gases de efecto invernadero provienen del transporte.
Por ello, dice, en 2023 invirtieron a través de The Climate Pledge $10 millones de dólares en C40 Cities para poner en marcha Laneshift, una iniciativa que busca acelerar la descarbonización de la industria mediante el uso de opciones de bajas emisiones para las flotas de última milla.
“Somos conscientes que las ciudades de América Latina ofrecen excelentes oportunidades para liderar la electrificación de vehículos, y la colaboración en estas regiones es fundamental para acelerar la transición hacia un medio ambiente más limpio y saludable para todos”, comenta.
Trabajaremos, dice, “para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y ayudar a las ciudades a desarrollar una valiosa hoja de ruta sobre cómo las ciudades de todo el mundo pueden acelerar el despliegue de vehículos de transporte de carga con cero emisiones e inspirar la integración de la justicia climática en las prácticas empresariales a nivel local”.
Parte de la estrategia de Amazon en materia de electromovilidad, agrega Valle, consiste en establecer procesos que permitan eficientizar las entregas.
“Estamos logrando grandes progresos para reducir las emisiones del transporte donde tenemos oportunidad. Al utilizar algoritmos para diseñar las rutas más eficientes y ubicar los centros de envío y las estaciones de entrega más cercanas a nuestros clientes”, señala.
En México, la plataforma de comercio electrónico, dice su vocero, colabora con más de 100 proveedores de última milla, quienes realizan entregas todos los días a través de diferentes medios de transporte, “desde bicicletas y entregas a pie, hasta camiones pesados, a lo largo y ancho del país”.
Su objetivo, añade Valle, “no es sólo garantizar entregas más rápidas e inteligentes, sino también procesos con impacto positivo que mejoren las condiciones de todos los implicados en el ciclo de vida de un paquete”.
Dentro de los casos de éxito de la empresa estadounidense, en 2022, se incorporaron más de 9,000 vehículos eléctricos de reparto al total de la flota mundial y se entregaron más de 145 millones de paquetes utilizando éstos en Estados Unidos y Europa.