Voltea a ver

Escrito en OPINIÓN el

La película 'No Mires Arriba' de Netflix, nos cuenta la odisea de dos astrónomos, para advertir al mundo que un meteorito de grandes dimensiones se acerca a la Tierra y amenaza con destruirla. El apocalipsis se acerca, pero nadie quiere mirar hacia arriba. Los políticos solo piensan en cómo sus decisiones podrían afectarles en las urnas o en su imagen pública, y la sociedad, escéptica y explotada por el consumismo, prefiere ignorar estas alertas.

La película es ficción, sin embargo, las respuestas ante las crisis por la vida, son muy similares en la realidad.

En Nuevo León, ante el terrible hecho de la localización de fosas en una cancha de futbol, con 12 Personas asesinadas, vimos a través de los noticieros que una importante comitiva de autoridades Federales y Estatales acudieron al pie de fosas y días después el Fiscal General, declaró: “Todos los que estaban ahí, tenían relación con la delincuencia organizada”, y al cuestionarle los medios si era una fosa de criminales respondió “claro que sí”. ¿Cómo eso puede ayudar a las víctimas, a sus familias y a la sociedad? De su visita sólo quedaron las fotografías y de las declaraciones la revictimización, mientras todos los días nos siguen asesinando y desapareciendo.

El 09 de febrero, Ángel de 14 años, falleció de manera sospechosa en una de las instalaciones del DIF Capullos y fue cremado, todo permaneció oculto, hasta que testigos actuaron, señalando que el niño había sido golpeado y sedado antes de fallecer. El Gobernador y la titular de AMAR a Nuevo León, quienes han hecho públicas sus visitas y compromiso con los niños y niñas de esa institución, callaron ante la muerte de Ángel, evidentemente este hecho no les daría una foto bonita, sin embargo, hechos tan graves, son los que deberíamos voltear a ver.

La manera superficial de abordar los problemas, la hemos padecido por varias administraciones, es urgente que las autoridades asuman y enfrenten sus responsabilidades.

Criminalizar a las víctimas no solo es una grave violación de derechos humanos, en el fondo, también es una forma de claudicación del Estado a sus obligaciones que no podemos permitir. El principio de presunción de inocencia es un derecho que todas y todos tenemos.

Al igual que los astrónomos en la película, las familias de FUNDENL han padecido durante 10 años, en la vida real, una odisea para ser escuchadas.

Como sociedad es importante, voltear a ver y actuar ante tan graves violaciones a los derechos, porque como si fuera también un meteorito, la inseguridad y la violencia están atentando contra la vida y su esencia: La Humanidad.