Síndrome de Down

Escrito en OPINIÓN el

Mañana 21 de marzo es el día en que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas decretó, en diciembre de 2011, como el día para conmemorar el Día Mundial con Síndrome de Down.

Lo determinó con la intención de crear conciencia recordar la dignidad de las personas con discapacidad intelectual, como promotores del bienestar y de la diversidad de sus comunidades; así como resaltar la importancia de su autonomía e independencia individual, en particular la libertad de tomar sus propias decisiones.

El Síndrome de Down es un trastorno genético en el cual una persona tiene 47 cromosomas en lugar de 46, y se presenta una copia extra del cromosoma 21, lo cual ocasiona cambios en la manera en que se desarrollan el cuerpo y el cerebro de las personas.

De acuerdo a la ONU la incidencia de personas que presenten la condición de Síndrome de Down, es de una persona por cada mil 100 nacimientos; en México la incidencia se estima en uno por cada 650 nacimientos.

En Nuevo León, de acuerdo al censo 2020 del Instituto Nacional de Geografía y Estadística, 69 mil 219 personas presentan algún nivel de discapacidad mental, de los cuales siete mil personas corresponderían a personas con Síndrome de Down.

El martes nos visitaron en el Congreso del Estado niñas y niñas del Centro Educativo TEDI, institución sin fines de lucro dedicada a la educación y formación de personas con Síndrome de Down.

Debemos de agradecer a instituciones como esta, por dedicarse a atender a las niñas y niños con Síndrome de Down, quienes, con una atención adecuada, con las herramientas necesarias, pero sobre todo con el amor y comprensión de su familia y de la sociedad, pueden adaptarse a su entorno.

Debemos buscar mejorar su calidad de vida, mediante programas y servicios especializados que apoyan su inclusión familiar, educativa y social y para ello tendremos que hacer ajustes a algunas leyes, para garantizarlo.

Para ello es que, a través de un Parlamento Abierto, como estamos trabajando en la 76 Legislatura del Congreso del Estado, es que podemos escuchar a los padres de familia, especialistas, educadores, psiquiatras, psicólogos, empleadores, pero sobre todo a las personas con Síndrome de Down para mejorar la normativa.

Se debe buscar cómo apoyar legalmente a las instituciones que trabajan, desde diversas trincheras, por mejorar la calidad de vida y bienestar de las personas que presentan la condición de Síndrome de Down.