San Pedro.- Un empresario denunció haber sido víctima de un presunto intento de extorsión y abuso de autoridad por parte de elementos de la Policía de San Pedro, así como de oficiales de Investigación de ese mismo municipio, durante un operativo ocurrido el pasado sábado en Plaza Fiesta San Agustín, pero las autoridades municipales negaron las acusaciones al señalar que "en ningún momento los elementos solicitaron algún tipo de pago a los involucrados".
César Villarreal Cantú, propietario de la empresa “Corporativo Vacacional Monterrey S.A. de C.V.”, relató a ABC Noticias que varios policías, tanto uniformados como vestidos de agentes, ingresaron a su local sin mostrar orden judicial y presuntamente intentaron obligarlo a devolver 10 mil pesos a una clienta identificada como Patricia Corral Gamboa, quien, según el empresario, labora en un museo del municipio de San Pedro.
“Mi nombre es César Villarreal, empresario en el área turística. El día de ayer (sábado) llegaron policías uniformados de San Pedro, acompañados de dos policías investigadores sin logotipo de ninguna autoridad, sin identificarse con su nombre ni con sus placas, a exigirme cierta cantidad de dinero como devolución a una de mis clientas que al parecer trabaja en el municipio de San Pedro”, declaró Villarreal Cantú.
Según la denuncia interpuesta ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, los hechos ocurrieron dentro del local comercial dedicado a la venta de membresías vacacionales, y el conflicto con la clienta se originó luego de que esta solicitara la devolución de un anticipo, petición que el empresario le pidió canalizar a través de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
La mujer se retiró del negocio y más tarde regresó acompañada de policías municipales y dos hombres vestidos con ropa táctica, uno de ellos identificado como “J. Parra”.
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En respuesta a los señalamientos, el municipio de San Pedro informó por medio de un comunicado, que rechaza que se haya tratado de un intento de extorsión, y es que, según la versión oficial, durante un recorrido de vigilancia en la plaza comercial, una mujer solicitó auxilio al señalar que fue tratada con agresividad por parte del encargado de una agencia de viajes.
Según el informe, los oficiales intentaron dialogar con el empresario, quien adoptó una actitud hostil, motivo por el cual se le colocaron aros de sujeción como medida preventiva. No obstante, al calmarse la situación y no haber una denuncia formal, se retiraron los aros y no se procedió con detención alguna.
“La Secretaría de Seguridad Pública reitera su compromiso absoluto con la transparencia y la legalidad, y colaborará con cualquier autoridad que lo requiera para el esclarecimiento de los hechos”, se concluye el comunicado.