Estado de México. – Un descuido de parte de sus secuestradores fue clave para que Alexa lograra escapar de ese sitio a donde fue llevada contra su voluntad, y donde había más mujeres que iban a ser trasladadas desde el Estado de México hasta Nuevo León.
Gracias a su astucia pudo salir ilesa y en entrevista con El Universal, se atrevió a contar todo lo que vivió durante aquellas 16 horas que resultaron ser una total pesadilla.
Alexa reveló haber sido interceptada el pasado 30 de septiembre por unos tripulantes de un Jetta en color rojo en la zona de Lomas Verdes, Naucalpan, justo a pocos metros de las instalaciones de la policía estatal y municipal.
“Dos hombres, uno maduro y el otro de unos 22 años, bajaron del auto rojo y con un arma me gritaron que me bajara, pensé que era un asalto, que querían mi coche y no dudé en abrir la puerta para dárselos, fue entonces cuando me sometieron por el cuello y me obligaron a subir a su auto frente a otros conductores y gente que caminaba en la calle”, señala Alexa, a quien le pusieron una bolsa negra en la cabeza.
Cuenta haber sido subida a dicho auto contra su voluntad y posteriormente trasladada a una casa de seguridad ubicada entre milpas en Metepec.
Al llegar, siendo arrastrada por el cabello hasta un cuarto sucio donde había una colchoneta en malas condiciones, Alexa vio a más mujeres en el lugar, y logró escuchar que todas iban a ser vendidas en una operación de trata de blancas al estado de Nuevo León.
Alexa pasó la noche en ese cuarto, el cual tenía una sola ventana alta y en donde pasó un rato escuchando como hombres hablaban en clave.
Sin embargo, cuando los secuestradores salieron del lugar, Alexa se dio cuenta que un joven que se había quedado a cargo había dejado la puerta abierta, y fue ahí donde aprovechó para salir del sitio y llegar hasta una zona donde había casas, en donde pidió auxilio.
“Corrí, corrí lo más que pude por una milpa que estaba muy crecida, aun así, lo hacía agachada y a lo lejos escuché los gritos del hombre que salió a buscarme, llegué hasta una barda muy larga, larga y pude salir de ese predio. Volví a correr, pasé campos de futbol vacíos hasta llegar a una zona de casas donde pedí auxilio, fue entonces cuando me di cuenta que estaba en Metepec”, indicó la joven, quien logró poner a salvo su vida.
Mismo operativo, falló
Recientemente, y en la misma zona de Lomas Verdes, otra conductora fue amenazada por un hombre apoyado en un arma de fuego, quien intentó raptarla.
No obstante, la chica recibió el apoyo de varios conductores y el hombre fue asegurado, más tarde, la policía se encargó de él.
El rostro del detenido comenzó a circular y Alexa logró identificarlo, dándose cuenta que había sido uno de los que la habían subido al auto Jetta que la llevó hasta Metepec.