Mazatlán. - El inicio de la Semana Santa se pintó trágico en Mazatlán, Sinaloa, toda vez que el pasado 8 de abril se registró la caída de una avioneta en el mar, que derivó la muerte de un bebé y un saldo de cuatro personas heridas.
En la aeronave viajaban el piloto y cinco pasajeros, cuatro de ellos menores de edad y una persona adulta identificada como Denisse Alejandra “N”, de 47 años de edad.
Cuando la avioneta impactó contra la superficie del canal de navegación, muy cerca de la Isla de Piedra, pasajeros de los catamaranes y cuerpos de auxilio acudieron al rescate, y pudieron salvar a Denisse y a los menores identificados como Sergio “N”, María Ángela y Denis Alejandra, que fueron trasladados a un hospital de la ciudad.
El cuerpo del cuarto menor, que por cierto era hijo del piloto, no fue hallado hasta varias horas después por integrantes la Secretaría de Marina, bomberos, Cruz Roja, Secretaría de Seguridad, Protección Civil municipal y Estatal, quienes colaboraron en el operativo.
El cadáver del pequeño fue localizado en la cabina de la avioneta, que se inundó después del impacto sufrido.
Respecto al aeroplano, Eloy Ruiz, coordinador de Protección Civil municipal, informó que pertenece a una empresa dedicada a dar paseos turísticos, sin embargo, los detalles en torno a la causa de las fallas del mismo son aun inciertos, y se espera que puedan darse a conocer próximamente en un informe que correrá a cargo de Aeronáutica Civil.
Protección Civil de Sinaloa señaló que el piloto esta en calidad de desaparecido, por lo que el operativo sigue en activo. La aeronave sobrevolaba a baja altura cuando se desplomó y sus restos quedaron flotando en las aguas.