El destino alcanzó a ‘El Bronco’

Escrito en OPINIÓN el

Dimitir por el bien de Nuevo León y por la catástrofe que trajo a la entidad. Eso le exigí al entonces gobernador, Jaime Rodríguez, a nombre de la bancada de MC en 2019, en su Cuarto Informe de Actividades.

Y hoy su destino lo alcanzó, enjuiciado por sus delitos, en un proceso fundado en las denuncias interpuestas por nuestro gobernador Samuel García y nuestro Movimiento.

En ese Informe le reclamé, de frente su pésimo gobierno y el sepultar la esperanza ciudadana generada por su triunfo como candidato independiente en 2015. Le dije que logró lo impensable: Transformar un fenómeno de esperanza en lo contrario: pesimismo, inseguridad y decepción de la gente.

Entre otras, estas fueron las causas por las que pedimos la renuncia del “Bronco”:

1. Las crisis de Movilidad, Contaminación y Seguridad en que sumió al estado, que aún persisten, por su nulo o deficiente trabajo. 2. Los emblemáticos casos de corrupción sin sanción, como el “Cobijagate”, el “Bronco Dron”; la malversación de programas sociales como “Aliados Contigo” y sus funcionarios involucrados en la recolección de firmas para su campaña presidencial.

3. La renuncia a su Gabinete de personas que daban solidez a su Administración, dejando un gobierno sin legitimidad.

4. Las evaluaciones nacionales que lo colocaban como el segundo peor Gobierno en México.

5. El proceso de sanción que le abrimos en Congreso, impulsado por Movimiento Ciudadano, por desviar recursos públicos para su campaña presidencial. Por cierto, esto fue obstaculizado por las demás bancadas del Congreso: PAN, PRI, Morena, PT, Verde y una diputada que abandonó Morena y se hizo “independiente”.

Se obstinaron en no sancionar al “Bronco”, haciéndose sus cómplices y de Manuel González; de palabra y hechos, defendieron férreamente a ambos delincuentes electorales.

Por todo esto, pedimos al “Bronco” dimitir y permitir concretar un Gobierno de Coalición con los ciudadanos, que recuperará algo de todo lo perdido en esa gestión.

Y que él, ya como ciudadano y sin los privilegios del poder, preparara su defensa para su proceso de sanción. Pero Jaime Rodríguez no escuchó, lo que es muy costoso para las y los nuevoleoneses, pues fueron otros dos años valiosos perdidos en los vericuetos de un desgobierno… Y hoy, las consecuencias las vemos en el Estado y le caen al exgobernador con todo su peso.

En retrospectiva, la lección que nos deja este caso es que siempre debemos denunciar e intentar sancionar, las irregularidades de malos gobernantes.

Nota: La opinión de los columnistas es responsabilidad exclusiva de los mismos