Comisión Local de Búsqueda de Personas

Escrito en OPINIÓN el

Una institución con el firme objetivo de Buscar a las Personas Desaparecidas y Encontrarles; esa es la premisa por la que fueron creadas la Comisión Nacional y las Comisiones Locales de Búsqueda, a través de la Ley General en materia de Desaparición, impulsada por las familias de Personas Desaparecidas y aprobada desde noviembre de 2017.

Sin embargo, a más de 4 años de la Ley General y la creación de las Comisiones de Búsqueda, en la práctica, sólo ha crecido la burocracia y las familias continúan enfrentándose a los mismos obstáculos para la Búsqueda de sus seres queridos desaparecidos, como si no existieran estas Comisiones.

Los obstáculos, las omisiones y la revictimización que han quedado en evidencia en los casos recientes, han sido recurrentes desde hace más de 15 años, en un sistema de Justicia que evidentemente debe cambiar; pero la Búsqueda no puede esperar y ante esta crisis humanitaria, es que fueron creadas las Comisiones de Búsqueda.

En Nuevo León, el 13 de junio de 2018 fue publicado en el Periódico Oficial del Estado, el decreto que crea la Comisión Local de Búsqueda como Órgano Público Desconcentrado de la Secretaría General de Gobierno, dándole facultades para proponer al Ejecutivo la emisión del Programa Estatal de Búsqueda; formular informes trimestrales del cumplimiento del Plan; Determinar y ejecutar las acciones de búsqueda; Integrar Grupos de Trabajo para llevar a cabo acciones de Búsqueda; además de las que le asigne el Gobernador de Estado, entre otras.

Es decir, la Comisión Local de Búsqueda de Personas depende del Gobernador, quien puede asignarle mayores facultades para que cumpla con el objetivo de buscar y de encontrar a las 6,253 Personas Desaparecidas en el Estado.

El próximo 13 de junio se cumplen 4 años de la creación de la Comisión Local de Búsqueda de Personas en Nuevo León, a 4 años, la Comisión no ha presentado un Programa Estatal de Búsqueda, no cuenta con un sólo Arqueólogo o Antropólogo Forense, ni ha instalado su Consejo Consultivo Ciudadano, entre otras omisiones. El problema es de fondo y por más millones que le asignen, la Comisión de Búsqueda Estatal continuará siendo un elefante blanco, mientras no tenga las facultades necesarias y siga siendo dirigida por una funcionaria que trabajó 30 años en la Fiscalía, llevando casos que actualmente cuentan con recomendaciones de Derechos Humanos, por la obstaculización a la Justicia.

La Búsqueda de Personas Desaparecidas debe tomarse en serio en Nuevo León.