Las prótesis capilares, nietas del clásico bisoñé

La calidad de las nuevas alternativas de cabello postizo es tal que muchos las prefieren antes de someterse a una cirugía de injertos

David Elizondo
David Elizondo
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Brotan con éxito negocios de restauración de cabello

Entre las opciones estéticas para los problemas de alopecia están las prótesis capilares, las cuales han venido evolucionando y hoy una de sus mayores características es que son casi indetectables.

A diferencia de los bisoñés o peluquines tradicionales, estos productos ofrecen más tecnología y  personalización y son actualmente utilizados por muchos artistas y actores que ni siquiera sus mejores fans pueden detectar.

Con 12 años en el terreno de la estética capilar, David Elizondo asegura que hoy estas piezas se han normalizado.

“Cuando yo empecé con todo esto de las prótesis era totalmente un tabú; de hecho, en la página web se puso una leyenda de que, si querían, como un servicio adicional, podíamos ir a su casa a tomar medidas para tener más discreción”, narra.

Pero, ahora, dice, “ha cambiado totalmente, hemos visto un comportamiento muy diferente en el mercado; antes era como muy escondido y ahora los clientes realmente se sienten tan orgullosos del resultado que obtienen, que ellos mismos lo presumen”, comenta.

En su experiencia, esto obedece a los elementos y la forma de crear la prótesis y la posibilidad para el usuario de tener una vida normal, pues les permiten nadar o hacer ejercicio, sin que la próstesis se retire o se note.

Elizondo utiliza esta tecnología de origen alemán atendiendo en su salón mayormente a clientes de alrededor de 40 años, aunque también lo visitan pacientes desde los 31 y hasta los 60 años. 

Además, no todos son hombres, ya que cada vez más las mujeres también se interesan en soluciones de este tipo para disimular los problemas de alopecia.

El ABC de las prótesis capilares

Para determinar qué prótesis instalar, se hace un análisis de las características y necesidades del cliente.

Si se cuenta con stock existente, en el caso del salón de David Elizondo, se inicia el proceso de colocación de la pieza. Este tarda alrededor de unos 40 minutos. Cuando no se dispone o el cliente tiene necesidades particulares, se trae la pieza desde el extranjero.

Además de la colocación, realizan un corte adecuado para el cliente y se le indican las medidas a tomar para cuidar su prótesis.  

Este material requiere un mantenimiento especial, que el propio salón ofrece. Este consiste en desinstalar la pieza, quitar residuos, desinfectarla, rasurar la zona y colocarla de nuevo. Esto se recomienda cada cuatro o seis semanas.

Debes tomar en cuenta que al tratarse de cabello que ya no está conectado al cuero cabelludo, la prótesis requiere tratamientos que mantengan la imagen y calidad del mismo. Esto mejorará su apariencia y se mantendrá desapercibida.

Aunque puede durar muchísimos años, lo ideal es cambiarla después de seis meses, para garantizar su efecto indetectable.

 

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